16 de febrero de 2012

historias pasadas que no hay que olvidar

 Ya hace mucho que no escribo acá, seis meses. Pasaron tantas cosas en este tiempo pero por ahora solo prefiero hablar una sola cosa: el amor de mi vida.
 En este tiempo crecí, madure un poco, reflexione y me di cuenta de muchísimas cosas. Por mas de que yo ame con todo mi corazón y todas mis fuerzas a una persona es imposible tenerla atada a algo que no tiene sentido, es algo inútil. Por eso es mejor dejarlo ser, ser libre, que esa persona sea feliz porque si realmente tanto la amas se supone que la queres ver bien, radiente y mas hermoso que ninguno aunque te cause el mayor dolor del mundo que no este al lado tuyo. Eso es lo que reflexione, por mas de que yo a Santi lo ame mas que nadie en el mundo, y de todo porque sea él el que este hoy en día al lado mio, si las cosas no se pueden dar entre nosotros por distintas razones es por algo. Yo a el lo amo y quiero verlo realmente feliz y si su felicidad se la brinda otra persona que no sea  yo, yo de todo corazón voy a estar feliz porque no hay nada que me llene mas el corazón que ver a la persona que yo amo feliz. Verlo sonreír a él a mi me hace bien. Aunque tengo que admitir que si lo veo con otra persona me muero, pero la felicidad de el a mi  me transmite felicidad. Si en algún momento nosotros dos tenemos que tener algo la vida se va a encargar de volvernos a cruzar en dos días, cinco meses o veinte años.